El mercado de alquiler a largo plazo de vehículos, el renting, continuó siendo en julio el impulsor de las ventas, a pesar de que el mes se cerró con una caída del 2,8% en las matriculaciones. El arrendamiento de turismos creció un 1% y sirvió para paliar el descenso global, al que contribuyó el hecho de ser un mes con un día laborable menos que el del año pasado.

Esta circunstancia impidió que se batiera el récord de ventas de turismos de julio del 2004, como algunos expertos del sector habían pronosticado. Pese a ello, las 162.999 unidades del pasado mes lo convierten en el segundo mejor julio de la historia, según los datos facilitados ayer por la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC).

Luis Valero, presidente de ANFAC, restó ayer importancia al registro negativo de julio y precisó que si se hubiera sumado "el día y medio menos de actividad" que tuvo el mes se habría logrado un nuevo récord histórico. Valero aseguró que los datos se enmarcan en la misma tónica registrada a lo largo del año, y añadió que no se esperan cambios bruscos en el signo de las matriculaciones, que estarán "ligeramente por encima" de las del año pasado. Las ventas acumuladas entre enero y julio ascienden a 972.712 unidades, lo que supone un crecimiento del mercado de turismos del 1,6%. El de todoterrenos creció en julio un 11% y acumula una subida del 26,3%.

SISTEMA AL ALZA El descenso del 3,4% que sufrieron en julio las ventas a particulares y empresas se vio compensado con el incremento del 1% en las efectuadas por compañías de alquiler (24.036 unidades). Estas acumulan en lo que va de año una subida del 2,8%, mientras que en el otro canal es sólo del 1,4%.

El mercado del renting es el responsable de que las matriculaciones se mantengan en niveles similares a los del 2003. En el primer semestre, las compras para este tipo de negocio ascendieron a 83.000 unidades, lo que supone un incremento de casi un 13% respecto del mismo periodo del 2004, según datos de la Asociación Española de Renting.

Las ventajas fiscales que ofrece esta fórmula de alquiler para las empresas y algunos autónomos están incentivando cada vez más ese mercado. En un plazo que no excede de los cinco años, el cliente disfruta de un coche nuevo por una cantidad mensual que puede deducirse fiscalmente. Los particulares, que no tienen ventajas fiscales, también se han apuntado a la fórmula, que permite pagar en la cuota, el mantenimiento, el seguro a todo riesgo e incluso un vehículo de reposición. Estos alicientes han hecho que la flota de vehículos en renting haya crecido un 12,8% en un año.