La bolsa española necesita algo más que una buena racha para remontar el vuelo. Ayer, por segundo día consecutivo, el Ibex 35, el principal indicador español, volvió a recoger los temores de los inversores ante las previsiones de menor crecimiento anunciadas por el Banco Central Europeo (BCE), y apostaron por las ventas, lo que llevó al mercado español a cerrar en 11.139,07 puntos, mínimo anual. El índice cayó 340,40 enteros en la sesión, equivalentes al 2,97%, con una caída acumulada en el 2008 del 26,63%.

En Europa, con el euro depreciándose hasta los 1,426 dólares, todas las principales plazas siguieron la misma estela que el Ibex y cedieron por encima de los dos puntos porcentuales, pero con retrocesos inferiores a los del parquet español: Londres, el 2,26%; París, el 2,49%; Fráncfort, el 2,42%; y Milán, el 2,36%.

Iberdrola lideró las pérdidas de los grandes valores del Ibex 35 con una caída del 6,03%, mientras que Repsol cedió el 4,32%, perjudicada por la tendencia a la baja del petróleo (se mantuvo en niveles de abril, a 105 dólares por barril); el Santander bajó el 2,80%; el BBVA, el 2,96%; y Telefónica, el 2,65%. En rojo, tras el desplome de Iberdrola, se situaron Técnicas Reunidas (-5,97%), Gas Natural (-5,06%), Telecinco (-4,75%), Repsol YPF (-4,32%), Bankinter (-3,87%), OHL (-3,62%), Iberdrola Renovables (-3,46%), Gamesa y BME (-3,26%), Enagás (-3,22%), Banesto (-2,88%) e Inditex (-2,87%).

Solo cuatro valores del selectivo se salvaron de los descensos, encabezados por Endesa, que pese a iniciar la sesión a la baja, avanzó el 4,27%, después de que el consejero delegado de Enel, Fulvio Conti, asegurara que la compañía está "satisfecha" de los resultados de la española. Acciona progresó el 2,27% y Grifols, el 0,79%. Unión Fenosa cerró plana. El volumen de negocio fue elevado, con 5.202 millones de euros, de los que 812 millones correspondieron al Santander, 640 millones a Telefónica, 515, a Iberdrola y 491, al BBVA.