Ya lo decía el padre del que fuera presidente de Ford y de Chrysler, Lee Iacocca: "En tiempos de crisis lo último que deja de hacer la gente es comer". La prueba de esta máxima es que los restaurantes de comida rápida (llamados fast food ) continúan abriendo establecimientos y la cadena Burger King facturó un 5,7% más en julio y en agosto, comparado con los mismos meses del 2007.

Un portavoz de Burger King, en declaraciones a Europa Press, explicó que la crisis está haciendo que un buen número de españoles acudan más a los 464 establecimientos que tienen repartidos por España y Portugal. Aunque han introducido hamburguesas más caras en sus cartas, que según dicen se venden mejor que otros productos más económicos, Burger King reconoce que sus comidas suelen costar entre tres y cuatro euros menos que los menús del día de los restaurantes tradicionales.

La cadena The Eat Out Group de Agrolimen, propietaria de Pans & Company, Boccatta o FresCo, también ha notado una afluencia mayor de público. En opinión de esta empresa, en tiempos de crisis sus restaurantes se convierten en "refugio" de muchas personas que no quieren gastarse más de seis o siete euros para comer.

Esta tendencia de consumir pero barato esta beneficiando a los planes de expansión de MacDonald´s en España, que ha decidido continuar con su proyecto de abrir 70 restaurantes más hasta el 2010 con una inversión de 135 millones de euros.

EL ´OUTLET´, EN ALZA Por las mismas razones que los restaurantes de comida rápida, la crisis es algo desconocido para las tiendas outlet, que venden más barata la ropa y los complementos de marcas conocidas porque son de fuera de temporada.

La cadena de centros Factory, propiedad de la inmobiliaria Neinver, prevé acabar el 2008 con un incremento en la facturación del 12%, hasta llegar a los 280 millones de euros. Los seis centros que tiene en Italia, Polonia y Portugal obtendrán unos ingresos de 615 millones.