La multinacional Roca notificó ayer al comité de empresa un expediente de extinción de contratos para despedir a 713 trabajadores de todos los centros del grupo en España, una cuarta parte de la plantilla. El expediente afecta especialmente a Cataluña, donde la empresa plantea 356 despidos entre la fábrica de Gavá y las oficinas centrales de Barcelona. El grupo tiene otras fábricas en Alcalá de Henares (Madrid), donde planea eliminar 180 puestos de trabajo, y en Alcalá de Guadaira (Sevilla), con 177 despidos. El fabricante de sanitarios atribuye la medida --que presentará hoy o mañana ante el Ministerio de Trabajo-- a la crisis de la construcción, que ha provocado "un constante descenso de las ventas". Los sindicatos censuran que el grupo haya presentado el expediente en periodo vacacional. La firma ya presentó el pasado año un ERE temporal.