EL BANCO BRITANICO ha vendido por 1.400 millones de euros al empresario irlandés Derek Quinlan y a la inmobiliaria Propinvest un rascacielos de 42 plantas en el distrito de Canary Wharf. La venta del edificio, alquilado al banco de EEUU Citigroup, representa la segunda mayor transacción inmobiliaria del Reino Unido.