Los tripulantes de cabina (auxiliares de vuelo) de Ryanair irán a la huelga el 25 y el 26 de julio (miércoles y jueves), en plena temporada alta. La convocatoria es de los sindicatos de España, Italia, Bélgica y Portugal, los países donde habrá más afectación. En España, donde la aerolínea irlandesa es la líder en número de usuarios, unos 250.000 pasajeros podrían verse afectados cada día (2.000 vuelos).

El paro lo convocan los sindicatos españoles USO y Sitcpla, SNVPAC (Portugal), UIL (Italia) y CNE (Bélgica). USO Sector Aéreo calcula que el seguimiento de la huelga será «masivo» entre los tripulantes de cabina de Ryanair ante «las penosas condiciones laborales que actualmente soportan».

Según el sindicato, el 75% de la plantilla está contratada a través de empresas de trabajo temporal, sujeta a la legislación irlandesa, sin salario base y cobrando únicamente por las horas de vuelo, lo que provoca «una tremenda inseguridad e inestabilidad laboral». «No descartamos que después de estas fechas haya más huelgas ni tampoco que otros países se unan» si no se alcanza un acuerdo, ha asegurado el responsable de vuelos del sindicato USO, Ernesto Iglesias.

En España están llamados a la huelga más de 1.800 tripulantes de cabina. Entre los cuatro países citados hay más de 4.000 empleados convocados al paro, que amenaza con alterar las vacaciones de verano de miles de personas.

«USO ha intentado negociar con Ryanair desde diciembre del año pasado, mes en el que la compañía anunció su intención de reconocer a los sindicatos. Sin embargo, Ryanair ha mostrado en reiteradas ocasiones que no busca negociar, sino imponer unilateralmente a todos sus trabajadores el sometimiento a la legislación laboral irlandesa y la renuncia forzada de los trabajadores de acudir a los tribunales españoles en favor de los irlandeses. Ryanair solo acepta, hasta el momento, incorporar algunos beneficios relativos a permisos por paternidad», ha denunciado uno de los sindicatos convocantes.

Ryanair destacó ayer que las demandas de los tripulantes de cabina (TCP) «no tienen sentido». En respuesta a la carta de demandas realizadas ayer desde Dublín por los auxiliares de vuelo, la low cost afirmó que está «en intensas negociaciones con sindicatos nacionales de tripulación de cabina de toda Europa».

La aerolínea defendió que un TCP de la compañía gana hasta 40.000 euros anuales, y que trabajan con un turno fijo de cinco días trabajados y tres seguidos de vacaciones. «O lo que es lo mismo, un fin de semana largo de tres días cada semana», apuntó. También destacó que por ley, no pueden volar más de 900 horas anuales (18 horas semanales), y que disfrutan de turnos que exceden todos los requerimientos mínimos de descanso de la agencia europea de seguridad EASA.

Se prevé que el paro tendrá afectación en toda Europa, pero en especial en España, donde la aerolínea es la líder del mercado (en los primeros cinco meses del año, con 17,7 millones de pasajeros). La huelga de los tripulantes de cabina de Ryanair se suma a otra convocatoria de paros que han realizado los pilotos de la low cost en Irlanda. En este caso, el colectivo de pilotos ha convocado una huelga de 24 horas el próximo 12 de julio.