La vicepresidenta económica, Elena Salgado, descartó ayer en Luxemburgo que se esté produciendo en España un nueva burbuja inmobiliaria como consecuencia del aumento de la compra de pisos que se está registrando ante la prevista desaparición a partir del 1 de enero de la tradicional deducción fiscal por adquisición de vivienda.

"Se necesitan viviendas en España y los consumidores seguirán comprándolas en los años sucesivos", aunque haya desaparecido la actual desgravación fiscal para los contribuyentes con rentas superiores a los 24.170 euros anuales, explicó la vicepresidenta.

"Los consumidores tienen un comportamiento racional y tratan de aprovechar al máximo las posibilidades que la legislación ofrece", precisó Salgado, tras recordar que antes de la subida del impuesto sobre el valor añadido (IVA) los ciudadanos también adelantaron las compras de bienes duraderos para pagar menos impuestos. En su opinión, ahora esta ocurriendo lo mismo con la vivienda.

PRECIO SOBREVALORADO La vicepresidenta eludió pronunciarse sobre el informe de la Comisión Europea que estimaba que el precio de los pisos sigue estando sobrevalorado en un 17% en España. "El precio de la vivienda ha bajado y no nos corresponde a nosotros si debe seguir bajando", señaló Salgado.

"El mercado de la vivienda en España no es un mercado tan único como parece opinarse. Se mezcla el mercado de segunda residencia con el de primera", advirtió. La supresión de la desgravación no está retrasando el ajuste de precios al 2011 y "el mercado de la vivienda irá normalizándose poco a poco", insistió Salgado.