El negocio del Santander va mejor de lo que esperaba el propio banco. La mayor entidad financiera de la zona euro anunció ayer un incremento del 11% al 11,5% de su previsión de rentabilidad (retorno sobre el capital tangible) para el 2018. En el primer semestre de este año ya se situó en el 11,7%, frente al 8,6% de media de los bancos comparables, pero el dato todavía no reflejaba la digestión del recién adquirido Popular. El grupo explicó la subida por la «mejora» de las perspectivas económicos en algunos de los principales mercado donde opera.

«En los últimos doce meses, hemos avanzado mucho en la vinculación de clientes y en mejorar la calidad del negocio. Seguimos viendo crecimiento fuerte en Latinoamérica y tendencias positivas tanto en Europa como en Estados Unidos. En Reino Unido, aunque el crecimiento del PIB se ha ralentizado, la evolución es mejor de lo que preveíamos. Como resultado, hemos aumentado nuestro objetivo de rentabilidad para 2018», explicó su presidenta, Ana Botín, en una nota.

Durante una intervención ante casi 200 analistas e inversores en la Bolsa de Nueva York, la ejecutiva apuntó que el banco prevé cumplir el año que viene todos los objetivos que anunció al mercado hace un par de ejercicios, entre ellos incrementar el beneficio por acción en dos dígitos y aumentar este año y el que viene tanto el dividendo total y en efectivo por acción como el valor neto tangible por acción. En el 2018, añadió, la entidad fijará unos nuevos objetivos para el 2021 y elaborará una «hoja de ruta de transformación digital» de la entidad.

Botín también desveló que el Popular ha logrado recuperar más de 10.000 millones de euros en depósitos (un 19% de incremento), de los 18.000 que perdió la entidad, desde que el Santander anunció la oferta comercial de un bono de fidelización para compensar a parte de los accionistas y acreedores del banco que perdieron todo su dinero con la intervención de la entidad por las autoridades europeas y su posterior venta al Santander.

Por su parte, el consejero delegado, José Antonio Álvarez, dijo que la rentabilidad sobre el capital tangible del banco en España alcanzará el 13% en el 2020, desde el 10% del 2016. Para lograrlo, el banco prevé un ahorro de costes de 500 millones por la compra del Popular.