El SCH dio ayer un golpe de mano en Cepsa, la segunda petrolera española, al lanzar una OPA (oferta pública de adquisición de acciones) sobre el 16% de la compañía. De triunfar, lograría el control del 49,23% del capital: el 35,9% de forma directa y el resto a través del pacto de sindicación con otros accionistas, entre ellos Totalfina. SCH, que ofrece 28 euros por acción de Cepsa, estima que el coste máximo de la operación será de 1.200 millones de euros (199.663 millones de pesetas). Totalfina, hasta ayer socio del banco en la petrolera, acusó al SCH de violar los pactos entre ambos grupos.

El banco español se escuda en que una ley española de julio pasado declaraba ineficaces los pactos sociales en los que los firmantes tuvieran una participación conjunta superior al 25% del capital de una compañía, como el que existía entre el SCH y Total. Por su parte, la eléctrica Unión Fenosa, que tiene un 5% de Cepsa, dijo ayer que venderá al SCH.