El sector turístico español afronta con optimismo la quinta temporada turística consecutiva de crecimientos con optimismo. Beneficiada por la situación de cierta inestabilidad internacional, España atraerá al 30% de los europeos durante este periodo de vacaciones; la barrera de los 75,56 millones de turistas extranjeros que se alcanzó en el 2016 será superada este año en unos 10 millones, según las previsiones del sector. El incremento de los visitantes procedentes de China y Asia en general; el alza de los precios turísticos en España, especialmente de los hoteles; y el incremento de la facturación de las agencias de viaje, son los elementos más destacados de la actual campaña turística.

La mayor llegada de extranjeros a España en los meses de verano se suma a la elevada actividad gracias al turismo interior. Si el año pasado llegaron a España solo 5,8 millones de turistas extranjeros en agosto, en el sector prevén que esa cifra aumente de manera considerable. Diciembre y marzo suelen ser los meses en los que llegan más turistas extranjeros.

AGENCIAS DE VIAJES

El presidente de la asociación de agencias de viajes ACAVE, Martí Sarrate, asegura que el balance turístico de este año estará en niveles de récord: "Se prevé un crecimiento del 10% en ventas esta temporada de verano sobre el año pasado". Según datos de las agencias de viajes este mes de julio, los españoles están gastando en torno a un 8% más en sus viajes. Según Sarrate, el gasto medio en las agencias de viajes se sitúa entre 1.500 y 2.500 euros para una estancia media de entre ocho y 15 días.

TENDENCIAS

Las tendencias de viajes de este año son similares al pasado año, con las capitales europeas como principales destinos internacionales. París, Londres, Moscú, San Petersburgo o los cruceros están al frente de las ventas. El auge del Aeropuerto de Barcelona también ha beneficiado la contratación de viajes internacionales a mejor precio, explica Sarrate. Catalunya sigue siendo una de la zonas turísticas más apreciadas de España.

TURISMO ASIÁTICO

Entre los fenómenos detectados este año destaca la elevada afluencia de turistas asiáticos, fundamentalmente de China y Japón (sin olvidar Corea). El influjo positivo de estos turistas va más allá de lo previsto, al ser consonante con la estrategia de desestacionalizar el sector y apostar por el turismo cultural. Suman más de un millón de visitantes de alto gasto.

En el caso de China con crecimientos estimados interanuales superiores al 40%. El director general de Turespaña, Manuel Butler, destacaba recientemente que la penetración de España en el mercado del viaje cultural y cosmopolita es solo del 10%. Se calcula que el turismo cultural mueve del orden de 80.000 millones de euros al año en todo el mundo.

TURISTAS CHINOS

Entre esos turistas amantes de la cultura y 'alérgicos' al sol playero destacan los chinos, verdadera esperanza de revitalización de las ventas en los próximos años. La razón es su elevado gasto per cápita. El gasto en compras en España de los turistas procedentes de China se incrementó el 42% durante los primeros seis meses de este año en comparación con el mismo periodo del año anterior, según un estudio publicado por Global Blue. El turista chino, con un ticket medio por acto de compra de 911 euros, aportó a la caja de las tiendas españolas el 33% de los ingresos procedentes de los viajeros de larga distancia.

ESPAÑA, PRIMER DESTINO EUROPEO

Un 30% de los turistas europeos que viajarán este verano ha elegido España como destino vacacional, según datos de la agencia de viajes 'on line' Rumbo. España se sitúa en la cabeza de destinos intereuropeos elaborado por Rumbo, por delante de otros países mediterráneos como Italia (escogido por el 22% de los turistas), Grecia (13%), Malta (5%) y Marruecos (4%).

La elección de España como destino de vacaciones entre los meses de julio y septiembre es, según revelan los datos de Rumbo, una tendencia al alza entre los europeos. Las reservas aumentaron en esta cadena el 27% en comparación con últimos dos veranos y es el turismo británico el que más creció este año: el 16% con respecto al mismo periodo del 2016. Nueve de las 10 localidades más reservadas por los europeos en España se encuentran en la costa. La lista la encabeza Barcelona, a la que siguen Madrid, San Antonio de Portmany (Ibiza), El Arenal (Mallorca), Valencia, playa de las Américas (Tenerife), Benidorm, Palma de Mallorca, Magaluf y Costa Adeje (Tenerife).

¿BURBUJA TURÍSTICA?

Pese a ese contexto positivo, el fantasma de la temida burbuja turística sigue presente, ante la sensación de saturación en algunas zonas. El servicio de estudios del BBVA reconocía esta semana que existen otras incertidumbres, como consecuencia de los efectos que pueden tener el 'Brexit' y la política monetaria del BCE en el sector. Las comunidades insulares y del levante serían las "más afectadas" dada su mayor exposición a la demanda británica y el mayor nivel de endeudamiento de esas zonas en negocios turísticos.

"Tras cuatro años de fuerte crecimiento de visitantes, algunas zonas empiezan a mostrarse saturadas, a lo que se puede sumar la recuperación de algunos mercados competidores. Pero, España continúa bien posicionada para seguir atrayendo visitantes, por lo que se espera que la desaceleración sea progresiva", aseguró esta semana el economista jefe para España y Portugal de BBVA Research, Miguel Cardoso.

INCREMENTO DE PRECIOS

Según el Observatorio Regional de BBVA Research, esta presión de la demanda se está trasladando a incrementos de precios, que si no se acompasan con una mejora de la calidad en el servicio, podrían ralentizar la demanda y, por tanto, la creación de empleo.

Un ejemplo de esos incrementos de precios se constata en los hoteles. El ingreso medio por habitación disponible de los hoteles españoles, el denominado índice 'revpar', se ha incrementado de forma ininterrumpida desde el 2009, con lo que ha acumulado un aumento del 34,7% hasta situarse en los 87,53 euros, frente a los 64,96 de hace ocho años. Según los datos de la encuesta de Coyuntura Turística Hotelera del INE, en el último año es cuando se ha producido la mayor subida, del 9,6%, puesto que en junio del 2016 el 'revpar' fue de 79,90 euros. La mayor subida en estos ocho años se ha producido en los hoteles de cinco estrellas, que han pasado de 140,88 euros por habitación ocupada a 200,11, lo que supone un incremento del 42%. Por su parte, el precio de los hoteles de cuatro estrellas se ha encarecido un 23,7%, hasta los 93,88 euros; el de los de tres estrellas un 36%, hasta 72,17 euros; el de dos estrellas el 26,4%, hasta 61,33 euros, y el de los de una estrella el 26,7%, hasta 60,34 euros.

INFLUENCIA EN EL COMERCIO Y LA RESTAURACIÓN

Otro efecto de segunda ronda, este positivo, del auge del turismo es el incremento de las ventas en el comercio. La patronal comercial de supermercados Asedas calcula que existen en torno a 2.400 supermercados en España especializados en la atención al turista, lo que supone según sus cálculos el 35% de las tiendas que operan en esas zonas. Esos establecimientos dan empleo a unas 60.000 personas y registran este año un incremento de las ventas acorde con el alza en el número de turistas.