La tercera jornada de huelga de estibadores ha vuelto a tener un seguimiento del 100%, pero sin el impacto catastrófico que se auguraba. Los elevados servicios mínimos y el reparto de las cargas de trabajo a lo largo de la jornada han reducido los efectos de la protesta laboral desde un punto de vista económico. La movilización convocada por la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar reivindica la estabilidad de los puestos de trabajo tras el fracaso de la negociación con la patronal Anesco para buscar un acuerdo en el escenario laboral que se abre con la liberalización del sector.
El seguimiento de la huelga este viernes ha sido total y se ha desarrollado sin incidentes. Los sindicatos se han quejado de que la carga de trabajo contratada en las horas en las que no se realiza el paro ha sido más elevada de lo habitual.
DANNY CAMINAL
Estibadores en la terminal de contenedores en el muelle de Barcelona.
El martes 13 se retomarán las negociaciones con la patronal estatal del sector y se intentará fijar un calendario de reuniones que permita "acercar posturas". Los estibadores tienen "muy claro" que "todo acuerdo pasa por la subrogación de la actual plantilla de estibadores y el mantenimiento del empleo". Salvo que de la reunión con la patronal "salga algo concreto, un compromiso real y firme de los empresarios para mantener el empleo en el sector", los sindicatos proseguirán con las movilizaciones "hasta cuando sea necesario".
Por el momento se mantiene la huelga general de 48 horas convocada desde las 8 horas del miércoles 14 de junio a la misma hora del día 16, además de los paros horarios ya programados para los días 19, 21 y 23 de junio.
El Puerto de Barcelona ha constatado que se están cumpliendo los servicios mínimos decretados, al igual que en el Puerto de Tarragona, donde la huelga también se ha desarrollado con normalidad. Esa misma tónica se ha registrado en el resto de puertos españoles.
