El Gobierno intentará frenar la sangría de las prejubilaciones en el sistema público de pensiones. La alternativa que propone la Seguridad Social se llama "segunda actividad" y consiste en incentivar a la empresa que, en vez de prejubilar a un trabajador, pacte con él un cambio de puesto, una reducción de horarios, o cualquier otra flexibilización.

El secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, afirmó que "para muchos trabajadores, el cambio de actividad es aún un concepto difícil de entender". No obstante, se mostró convencido de que esta es la medida del futuro.

Las posibilidades que estudia el Seguro con el cambio de actividad son poliédricas. Según Granado, su departamento estaría dispuesto a aportar "el dinero que haga falta" y a "aplicar cualquier medida" para lograr que las empresas pacten con sus trabajadores cercanos a la edad de jubilación una reubicación dentro de la empresa, con los recortes en la jornada de trabajo que necesite el empleado, a condición de que pueda seguir trabajando hasta los 65 años.

Granado se mostró preocupado por los costes que provoca en el sistema público de pensiones un trabajador que pasa al retiro cinco años antes de la edad legal (65 años) habida cuenta de que la esperanza de vida de los españoles supera los 83 años.

En el 2008, el Gobierno dará el primer paso para que la segunda actividad sea una realidad. La disposición quinta de los presupuestos para el próximo año establece una reducción del 50% en las cotizaciones por contingencias comunes en el caso de que un empleado cambie de actividad dentro de su empresa. De momento, solo si está impulsado por el riesgo de enfermedad profesional o, si es una trabajadora, por problemas en el embarazo o en la lactancia.

Granado también admitió que habrá que hacer algunas excepciones con ciertos colectivos, como el sector de la construcción o los transportistas.