Las empresas del sector de la madera tendrán algo más fácil a partir de ahora acogerse a la congelación salarial que prevé el convenio colectivo. Los sindicatos y la patronal han firmado un acuerdo pionero únicamente para este año que agiliza las condiciones que han de cumplir las empresas para no subir los sueldos al ligarlas a la situación coyuntural en lugar de exigir dos años continuados de pérdidas.

Las empresas que quieran congelar las nóminas tendrán que acreditar su "situación productiva, econó- mica y financiera real" así como sus previsiones para este año. A cambio, la patronal del sector (Confemadera) ha aceptado pagar el incremento previsto en el convenio en vigor desde el 2011, de un alza del 3,3% para este año por la suma del 2% del índice de precios de consumo (IPC) más 1,3 puntos.

Con este acuerdo se abre el camino a un equilibrio entre la reclamación de las patronales de revisar las subidas salariales ya pactadas y la resistencia de los sindicatos a cambiar el referente del IPC previsto por la inflación real.