El vicepresidente económico, Pedro Solbes, añadió ayer más confusión sobre la intervención que tuvo La Moncloa en enero del 2005, cuando se conoció un dosier sobre prácticas empresariales de carácter controvertido del presidente del BBVA, Francisco González.

En Bruselas, Solbes se refirió al documento que recogía presuntas irregularidades en la venta de FG Valores, propiedad de González, y dijo de él que "no era un informe oficial de la oficina económica del presidente" del Gobierno, sino "unos papeles que llegaron a la oficina económica del presidente".

Los papeles, de acuerdo con su explicación inicial, "se hicieron llegar de manera informal al vicepresidente de la CNMV por si tenían algún interés, y el vicepresidente los puso en conocimiento del presidente".

La explicación del ministro Solbes parafraseaba, en parte, el relato que el día anterior realizó Manuel Conthe, expresidente de la CNMV, para demostrar que su segundo y vicepresidente del organismo, Carlos Arenillas, actuaba como "correa de transmisión del Gobierno", en contra de la independencia exigida al regulador de los mercados financieros.

MALA INTERPRETACION Horas después, Solbes corrigió sus declaraciones. Según dijo, se "habían malinterpretado". Pero, de hecho, la corrección solo añadió más confusión. "De lo que sí tengo constancia, y eso es evidente, es de que ningún informe ha sido elaborado por ningún organismo oficial del Gobierno sobre este tema", dijo en su aclaración.

Solbes insistió en que la polémica sobre el informe "se está sacando de quicio", porque es "una historia vieja". El dosier se conoció a principios del 2005 y las investigaciones de la CNMV y la Audiencia Nacional zanjaron el tema. Aseguró que con en este asunto, como con la dimisión de Conthe, "no ha habido ningún comportamiento anómalo", a diferencia de los hechos "graves" que ocurrieron en la etapa de Gobierno del PP, en referencia al escándalo de Gescartera y al comportamiento en aquel momento de la presidenta de la CNMV, Pilar Valiente, que se vio forzada a dimitir de su cargo.

También ironizó con la posición del PP de que al presidente de la CNMV le nombre el Parlamento y recordó que durante dos legislaturas rechazó esa posibilidad. En su opinión se han producido "algunos excesos por parte del señor Conthe y muchos excesos" del PP.