Abrumado por las críticas de inactividad frente al "ajuste abrupto" de la economía --que es lo más lejos adonde llega el Gobierno para definir la situación actual--, el Ejecutivo se esforzó ayer en demostrar lo contrario.

El vicepresidente económico, Pedro Solbes, destacó que, sin apenas haber cumplido dos meses desde la toma de posesión (el 14 de abril), el Consejo de Ministros culminó ayer "el mayor paquete de medidas que cualquier país de Europa haya puesto en marcha, coherente con lo que la economía necesita y con el margen de maniobra que tenemos".

Tras impulsar en mayo un decreto con medidas urgentes (como la devolución de 400 euros en el IRPF), el Consejo de Ministros aprobó ayer un anteproyecto de ley que incluye la supresión del impuesto sobre el patrimonio (con efectos desde enero del 2008) y el nuevo sistema de devolución del IVA, que permitirá a todas las empresas el reintegro mensual del impuesto, sin esperar un año.

Son 7.800 millones para impulsar la economía en el 2009 (6.000 millones por adelanto de devoluciones y 1.800 por la supresión de patrimonio), tras los 10.201 del 2008.

EL OBJETIVO, DINAMIZAR "No vamos a frenar el gasto social ni a recortar derechos ni servicios a los ciudadanos. Al contrario, vamos a dinamizar la economía poniendo más dinero", enfatizó la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega.

Una vez más, siguiendo la consigna socialista, Solbes se resistió a aceptar la palabra "crisis" para definir la actual situación que, en su opinión, se ajusta más a expresiones como ajuste "intenso" o "abrupto" o desaceleración profunda.

"Somos perfectamente conscientes de que la situación es seria. ¿Cómo no vamos a serlo si el crecimiento trimestral es del 0,3%, aumenta la inflación, crece el desempleo, disminuye la tasa de afiliación y la construcción cae muy por encima de nuestras previsiones?", se preguntó. "Son datos que conocemos y les damos importancia", pero no se mejora la economía "creando desconfianza", añadió.

IMPUESTO DE PATRIMONIO La supresión del gravamen sobre patrimonio se ha articulado mediante una bonificación del 100% de la cuota y la desaparición de la obligación de declarar. El impuesto, como tal, no desaparece, ya que la ley contiene múltiples reglas de valoración conectadas con otros impuestos y su derogación complicaría la regulación tributaria, según fuentes de Hacienda.

Pero, en la práctica, casi 1,3 millones de contribuyentes (que incluyen más de 300.000 extranjeros con propiedades en España) ya no tendrán que declarar el impuesto en el 2009. El Estado deberá compensar a las comunidades por la pérdida de 1.800 millones de recaudación de este impuesto. Según Hacienda, la supresión beneficiará "a las clases medias; trabajadores y profesionales que invierten sus ahorros en inmuebles y fondos de inversión".

La devolución mensual del IVA aliviará, sobre todo, a las empresas nuevas (que soportan mucho IVA y aún venden poco) y a las que invierten mucho (que deben esperar un año para reingresar el impuesto soportado).

TURISTAS De paso, el anteproyecto de medidas fiscales aprobado ayer incluye cambios derivados del cumplimiento de directivas o sentencias europeas. Así, se reforma la deducción en sociedades por gastos en investigación (I+D+i) y se permite que la inversión se haga en cualquier país de la UE (sin el tope del 25%).

Además, se elevan las cuantías de los productos que podrán introducirse en el país libres de impuestos a partir de enero del 2009. Para los viajeros que lleguen por vía terrestre, el tope pasa de 175 a 300 euros (150 euros, para menores de 15 años). Si es por vía marítima o aérea, el tope pasa de 175 a 430 euros.