El Gobierno suizo puede entregar al de Estados Unidos datos de cuentas bancarias con depósitos a partir de 250.000 francos suizos (245.000 dólares o 165.000 euros) y no solo cuando se trate de sumas millonarias.

Las autoridades helvéticas han desvelado hoy el contenido de un acuerdo entre ambos países suscrito el pasado agosto con el fin de cerrar un litigio judicial abierto en EEUU contra el banco UBS, acusado de haber colaborado con clientes en este país para defraudar al fisco.

COMPORTAMIENTOS FRAUDULENTOS

El dato más relevante que se ha conocido hoy es que, entre las condiciones de la cooperación administrativa en materia fiscal que se acordaron, está que Suiza podrá comunicar informaciones bancarias de titulares que no necesariamente son millonarios, siempre y cuando exista evidencia de una actitud fraudulenta.

Entre esas últimas están consideradas las mentiras, la entrega de documentos falsos o inexactos, el intento de disimular fondos o no comunicar ciertos ingresos. El acuerdo está dirigido en parte a los clientes del banco suizo domiciliados en Estados Unidos y que, entre el 2001 y el 2008, eran titulares directos o detentaban los derechos económicos de cuentas sin declarar.

COOPERACIÓN ADMINISTRATIVA

Asimismo, involucra a ciudadanos norteamericanos que se encontraban detrás de la fachada de una sociedad establecida en algún paraíso fiscal. De las 4.450 cuentas que han sido objeto de una solicitud de cooperación administrativa por parte de EEUU, 250 pertenecen a clientes que mintieron o comunicaron documentos faltos o inexactos, y que tenían al menos 245.000 dólares por cuenta.

El resto de cuentas entran en la categoría de comportamientos delictivos "graves y duraderos" por parte de los clientes con fondos no declarados de, al menos, un millón de francos (unos 980.000 dólares).