El paro aumentó en 217.200 personas en el tercer trimestre del año, con lo que el número total de desempleados se situó en 2.598.800, lo que supone la mayor cifra alcanzada desde el primer trimestre de 2000, mientras que la tasa de desempleo alcanzó el 11,33 por ciento. Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) difundida hoy por el INE, la tasa de paro se ha incrementado en nueve décimas desde el segundo trimestre y es la más elevada desde el primer trimestre de 2004.

En los últimos doce meses el número de parados ha aumentado en 806.900 personas y, por primera vez desde 1994, la ocupación se ha reducido en tasa interanual, el 0,80 por ciento, lo que equivale a 164.300 personas ocupadas menos en ese periodo, con lo que el número de ocupados en septiembre se situó en 20.346.300 personas.

Por sectores, de nuevo la construcción fue el que registró mayor número de desempleados en el tercer trimestre del año, con 57.600, seguido de los servicios con 47.700, los que buscan su primer empleo, con 34.900 parados nuevos; los que perdieron su empleo hace un año, con 22.900, la industria, con 27.200 desempleados más y la agricultura con 26.900. La construcción y los servicios siguen siendo las actividades más afectadas por la crisis y en los últimos 12 meses han registrado 256.1000 y 232.200 parados más, respectivamente.

El incremento del desempleo se produjo en todas las edades, con especial incidencia entre los de 25 a 54 años, que sumaron 169.300 parados nuevos con respecto al trimestre anterior y 610.200 en un año, un aumento del 50,76 por ciento. El paro nuevamente fue mayor entre los hombres, con 170.700 desempleados más (el 14,43 por ciento más que en el segundo trimestre y el 69 por ciento más que hace un año) que entre las mujeres, con 46.600 nuevas desempleadas (el 3,88 por ciento más que en el trimestre anterior y el 25,66 por ciento más que hace un año). Sin embargo, la tasa de paro femenina fue del 12,66 por ciento, en tanto que la masculina alcanzó el 10,32 por ciento.

En los últimos doce meses, el paro aumentó en 806.900, el 45,03 por ciento más que hace un año, mientras que la tasa de empleo se situó en el 65,46 por ciento. En el tercer trimestre de este año el número de ocupados se situó en 20.346.300, lo que supone una caída de 78.800 empleados con respecto al trimestre anterior y de 164.300 en el último año.

Entre julio y septiembre, los asalariados disminuyeron en 106.800 personas hasta los 16.746.200, descenso que en el último año fue de 123.600. Del total de asalariados, los contratados indefinidos cayeron en 99.100, mientras que los temporales lo hicieron en 7.700, con lo que la tasa de temporalidad aumentó 14 centésimas respecto al trimestre anterior y se situó en el 29,53 por ciento. Por el contrario, en los últimos doce meses los contratos indefinidos crecieron en 320.200, mientras que los temporales se redujeron en 443.800.

El aumento del paro se ha visto agravado por el incremento de la población activa -en disposición de trabajar- que en septiembre ascendía a 22.945.100 personas, el 59,95 por ciento de la población, las cifras más altas de la historia. La caída de la ocupación en 164.300 personas en los últimos doce meses se debió principalmente a la destrucción de empleo en la construcción, con 354.200 puestos de trabajo menos, seguido de la agricultura, con 36.300, y de la industria, con 31.200, descensos que no pudieron ser compensadas con el aumento de la ocupación en 257.600 personas en los servicios.

En tasa intertrimestral, la ocupación bajó en 78.800 personas, debido a la caída en 134.800 ocupados en la construcción, 45.600 en la industria y 31.900 en la agricultura, mientras que solo se creó empleo en el sector servicios, con 133.400 nuevos empleados. La población extranjera está sufriendo de manera especial los efectos de la crisis, cuya tasa de desempleó aumentó un punto en el tercer trimestre, hasta alcanzar el 17,45 por ciento, con lo que ya suman 623.100 parados, 43.100 más que el trimestre anterior y 243.100 más que hace un año.

En el tercer trimestre había 4.101.500 hogares con todos sus individuos en paro, 47.100 más que en el anterior y 63.000 más que hace un año, mientras que el número de hogares con todos sus miembros ocupados sumó 10.483.800, 70.300 menos que en el segundo trimestre y 213.900 menos que hace un año. Por comunidades, Andalucía fue la más afectada por el aumento del paro, que se incrementó en 86.600 personas, seguida de Cataluña, con 50.700 más, y de Murcia, con 20.100 nuevos parados. Por el contrario, el desempleo solo bajó en Madrid (11.800), Aragón (3.600), Cantabria (1.800) y Asturias (1.000).