El nuevo recorte efectuado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en sus previsiones de crecimiento para España (hasta el 1,8% para este año y hasta el 1,7% para el 2009) inundó ayer de pesimismo la bolsa madrileña.

El selectivo Ibex 35 fue el indicador que más cayó de toda Europa con un descenso del 1,17%, que le llevó a perder por un punto la cota de los 13.600.

La negativa apertura de Wall Street y las malas perspectivas que presenta la campaña de resultados trimestrales de las empresas estadounidenses (el grupo de mensajería y servicios UPS recortó ayer su estimación de beneficio por acción) contribuyeron a convencer a los inversores de la conveniencia de recoger beneficios.

Entre los grandes valores del selectivo, solo Telefónica se salvó de la quema, al ceder solamente el 0,05%. Los bancos siguen sin ser capaces de ganarse la confianza de los analistas y los dos grandes, Santander y BBVA, se dejaron el 1,95% y el 1,28%, respectivamente. En el sector energético la cosa no fue mejor: Repsol perdió el 1,6%, mientras que Iberdrola descendió el 2,69%. Las mayores caídas fueron para Bolsas y Mercados (-4,07%), Sacyr (-3,9%, a pesar de su salida de la francesa Eiffage), Telecinco (-3,33%), Iberia (-3,03%) e Indra (-2,4%). Los únicos repuntes fueron para Ferrovial (2,23%, ante las expectativas de que cierre con éxito la refinanciación de la deuda que asumió para comprar BAA), Cintra (2,14%), Acciona (1,06%), Inditex (0,9%), Gamesa (0,53%) y Técnicas Reunidas (0,35%).

De los principales mercados europeos, Roma (-0,1%) y Londres (0,14% de bajada) fueron los menos castigados, seguidos de Fráncfort (-0,75%) y París (-0,77%). El selectivo europeo, el Eurostoxx 50, cerró con un retroceso del 0,9%, lastrado por la banca. La caída de las reservas de crudo en Estados Unidos empujó al barril de Brent, de referencia en Europa, hasta un nuevo máximo de 108,77 dólares. El euro se cambió a 1,58 dólares, cerca de su récord.