El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, realizó una enérgica defensa de la política del instituto emisor europeo para hacer frente a las turbulencias financieras. "Lo importante es la estabilidad de los precios y la solidez financiera, por eso queremos tener bajo control la inflación y darle solidez a las finanzas", defendió. Trichet acudió a la cumbre económica que cada año se celebra en Davos (Suiza) en medio del reproche casi unánime de los medios financieros europeos. Estos atribuyeron el último desplome de las bolsas al anuncio del BCE de que no estaba previsto bajar el actual precio del dinero en la zona euro (del 4%), pese a que la Fed recortó 0,75 puntos el tipo de EEUU, al 3,5%.

A pesar de las presiones y "consejos" recibidos desde el FMI y la OCDE para que no se eleven los tipos en la eurozona, Trichet transmitió la idea de firmeza dentro de la institución monetaria.