El operador turístico alemán TUI se propone realizar una profunda reorganización en la compañía y pretende eliminar hasta 4.000 puestos de trabajo, sobre todo fuera de Alemania, aunque los detalles se conocerán la próxima semana. También en Alemania habrá un reajuste de plantilla, por la unificación de las cadenas Tui GMBH y Tui AG.

El coloso turístico, uno de los mayores del mundo, registró una reducción de sus beneficios netos de hasta 247 millones de euros en los primeros nueve meses del año, con un alza importante del endeudamiento. El cambio en los hábitos de los clientes, que cada vez compran más sus viajes a través de internet, también ha perjudicado a la compañía de viajes.

La fuerte caída de las ganancias netas del grupo se debió a las pérdidas de su división naviera, por los costes de la integración de la canadiense CP Ships, por una bajada en las cuotas de carga transportada y por el encarecimiento de la energía.