La Comisión Europea afirmó ayer que Alemania y Francia han hecho los ajustes necesarios para que su déficit público no supere el techo máximo del 3% del producto interior bruto (PIB) en el 2005 y, por tanto, puede paralizarse el procedimiento sancionador contra ambos países.

No obstante, el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, advirtió de que "la situación presupuestaria en los dos países continúa siendo frágil" y que deberán realizar más ajustes importantes en el 2006 para evitar otro descontrol de su déficit público. Paralelamente, el Ejecutivo comunitario, reunido en Estrasburgo, concluyó que "no es necesario adoptar nuevas medidas suplementarias" contra ambos países.

El déficit público alemán, según el análisis del Ejecutivo comunitario, se situará en el 2005 en el 2,9%, frente al 3,9% que se producirá este año. El déficit público francés se situará justo en el límite del 3% en el 2005, tras llegar al 3,7% este año. E. O.