La Unión Europea (UE) ha dado el visto bueno definitivo a la normativa que obligará a que las botellas o latas de aceite de oliva "virgen" o "virgen extra" indiquen desde julio próximo su país de origen o que está producido en la UE, así como si está mezclado con productos de varios estados.

Los fabricantes deberán mencionar en el etiquetado del aceite de los dos tipos citados su procedencia: los operadores europeos podrán elegir entre nombrar al país de origen o decir que está elaborado en la UE.

La decisión ha sido aprobada en el Comité de Gestión de la UE, formado por expertos de los Veintisiete.

Hasta ahora indicar el origen del aceite de oliva ha sido voluntario para las industrias y operadores, pero las reglas actuales "han sido insuficiente para evitar confundir al consumidor sobre las características y el origen de ciertos productos", según fuentes de la Comisión Europea (CE).

MEZCLAS Por otro lado, para las mezclas de aceites originarias de más de un país de dentro o de fuera países comunitarios, en sus envases deberán figurar indicaciones como "mezcla de aceites de la UE"; "mezcla de aceites no comunitarios" o "mezcla de aceites comunitarios y no comunitarios", según han pactado los Veintisiete. También podrán incluirse en la etiqueta ciertos términos que describan las características organolépticas sobre el sabor y el olor de ese alimento y de las aceitunas, que se han definido recientemente por el Consejo Oleícola Internacional.

Asimismo, la UE va a seguir permitiendo las mezclas, pero la normativa posibilita que un país prohíba la producción de aceite de oliva entremezclado con otros aceites vegetales --como semillas o girasol-- para consumo interno.