La Unión Europea (UE) presionó ayer infructuosamente a China para que revalúe su divisa durante la cumbre Asia-Europa (Asem) celebrada en Bruselas y con el telón de fondo de la guerra de tipos de cambio que mantienen las principales potencias económicas mundiales para intentar fortalecer la recuperación económica en sus respectivos territorios.

El presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, el presidente del Eurogrupo, el primer ministro luxemburgués Jean-Claude Juncker, y el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, reclamaron al primer ministro chino, Wen Jiabao, una "apreciación amplia y significativa" del subvalorado yuan en una reunión al máximo nivel. Pero Juncker reconoció que las autoridades chinas no compartían el punto de vista de los dirigentes de la zona euro de que el valor del yuan se mantiene artificialmente bajo para impulsar las exportaciones. Wen Jiabao, por su parte, enfatizó que lo que necesita la economía son unos tipos de cambio estables.