A partir del 2011, la actual deducción por compra de vivienda (15% de la cantidad invertida sobre un máximo anual de 9.040 euros) solo se mantendrá para contribuyentes con bases imponibles de hasta 17.707 euros, que podrán beneficiarse de una rebaja máxima de 1.356 euros (el 15% de 9.040). A partir de ahí, la deducción irá bajando y llegará a 0 para rentas de más de 24.707 euros. Si antes del 31 de diciembre se formaliza la compra será posible conservar la deducción.