El presidente de Fiat, Paolo Fresco, anunció ayer que en el consejo de administración del viernes hará efectiva su marcha de la entidad y propondrá como sustituto a Umberto Agnelli, representante de la familia que controla el grupo turinés. La decisión supone una anticipación de su salida, prevista para la primavera, tras cumplir 75 años.

Umberto Agnelli, hermano del gran patriarca familiar, Giovanni, fallecido en enero, es el nuevo jefe del clan que controla el 30% de la compañía. Tras fallecer Giovanni, la sociedad que aglutina a la familia eligió como nuevo presidente de la misma a Umberto, nacido en 1934.

Entre los planes de futuro está la recapitalización. La gestión de Fresco ha estado marcada por la alianza con General Motors, que controla el 20% de Fiat Auto. El acuerdo implica que Fiat puede vender el 80% restante a los estadounidenses, entre 2004 y 2009, aunque ese pacto podría ser revisado.