El Gobierno quiere que Unión Fenosa adquiera parte de las desinversiones impuestas al autorizar la oferta de compra (OPA) de Gas Natural sobre Endesa. La tercera eléctrica española, controlada por ACS, se hará con centrales en Cataluña y Andalucía con unos 1.200 megavatios y con 250.000 clientes de distribución de gas, según afirman fuentes conocedoras de este proyecto.

La totalidad de esos activos y los clientes de gas forman parte de las desinversiones añadidas por el Ejecutivo socialista a los planes de Gas Natural, que ascendían a 3.100 megavatios y que el Gobierno elevó finalmente a 4.300. El objetivo final es afianzar tres grandes eléctricas y dos gasísticas con capital español y con un mix más equilibrado de fuentes de producción eléctrica.

EL TERCER OPERADOR El Gobierno quiere reforzar al tercer operador español; por delante de otros como la italiana Enel, que han mostrado su interés en comprar activos consecuencia de la OPA. No se descarta que Enel pueda hacerse con activos del acuerdo de Gas Natural con Iberdrola, que debe ser analizado por las autoridades de la Competencia.

La entrada de Fenosa en la distribución gasística en zonas geográficas nuevas serviría, a su vez, para reforzar al gigante italiano ENI, socio de la española en ese negocio. A su vez "daría opciones a negociaciones con la portuguesa GALP", participada por la italiana, de cara a crear un grupo energético hispanoportugués, según fuentes del sector. Fenosa, presidida por Florentino Pérez, tiene una sólida posición financiera para adquirir activos sin endeudarse, según los analistas. La suma Fenosa-ACS con los nuevos activos configuraría un grupo del tamaño de Iberdrola.