La Federación de Industrias Afines (FIA) de UGT y el Sindicato Nacional da Indústria y da Energía (Sindel) de Portugal firmaron ayer un acuerdo de colaboración para hacer un frente común en la defensa de los trabajadores ante la liberalización del sector energético en general y del eléctrico en particular. Además, persigue la defensa del modelo ibérico, donde se respete el medio ambiente, se tenga en cuenta la realidad social y se cuente con los interlocutores sociales.

Así lo puso de manifiesto la secretaria general de FIA-UGT, Francisca Sánchez Chinarro, que destacó que a partir de ahora la colaboración entre ambas fuerzas será aún más estrecha, sobre todo frente al proceso de privatización de la compañía lusa EDP, la que gestiona el sector energético del país vecino. En este sentido indicó que quieren conocer cómo se va a desarrollar ese proceso y qué dimensión va a tener el modelo ibérico de la energía.

El acuerdo establece el intercambio fluido de informaciones y la organización de reuniones periódicamente, lo que supone, a juicio de Sánchez Chinarro, "un paso más en lo que es la relación bilateral con Portugal, ya que al final lo que se va a decidir es el modelo ibérico".

La responsable de FIA-UGT abogó por la convergencia sindical en la defensa del modelo ibérico, del europeo o de un modelo social de dimensión internacional, ante la organización del capital, que se mueve, recordó, por grupos de presión e intereses comunes.

CAMBIOS EN PORTUGAL Por su parte, el secretario nacional de Sindel, Antonio Cardoso, aseguró que "el modelo portugués se aproxima a pasos acelerados al modelo español, con la liberalización total del mercado energético", por lo que es fundamental, dijo, que "los sindicatos se unan y trabajen juntos".

A este respecto, ambas fuerzas sindicales anunciaron que próximamente entablarán también conversaciones con sus colegas de Francia e italia.