La campaña de tomate para industria concluirá en Extremadura, que concentra el 82% de su producción en todo el país, con cerca de 1,4 millones de toneladas, lo que representa un descenso de más de un 40% frente a la contabilizada en el 2005, según informaron fuentes de UPA.

Estas fuentes indicaron ayer a Efe que, a falta de que concluya la campaña la próxima semana, el descenso de la producción por hectárea se situará en torno a los 20.000 kilogramos y recordaron que al inicio de la campaña se anunció que para que fuese rentable se requería una producción de 65.000 kilos por hectárea.

Asimismo, explicaron que mientras que la campaña pasada las condiciones externas propiciaron una "producción excepcional", este año las circunstancias meteorológicas han sido muy desfavorables.

En este sentido, advirtieron de las "graves pérdidas", aún por cuantificar, que sufrirá el sector y recordaron la crisis del tomate para industria derivada de las penalizaciones en las ayudas comunitarias por sobreproducción y de la caída de los precios en las transformadoras.

Actualmente, España tiene asignado un cupo de 1.200.000 toneladas de tomate para la industria, si bien solo la comunidad extremeña superó el año pasado una producción de dos millones de toneladas.

El sector afectado y las organizaciones agrarias se manifestaron en Madrid el pasado marzo por la crisis del sector y propusieron al Ministerio de Agricultura la aplicación de medidas transitorias. Entre ellas destaca establecer ayudas directas dentro del régimen de minimis y la revisión del índice de rendimiento del IRPF.