La estabilidad que suele caracterizar a las tradiciones también se puede comprobar en las ventas de coches de segunda mano. Las operaciones entre particulares no solo siguen siendo el principal canal de venta, sino que incrementan su peso a costa de los concesionarios y las cadenas especializadas. Las compras directas al propietario del vehículo han pasado de ser el 46% de todas las operaciones en el 2005 al 50% el año pasado. El aumento de la importancia de las operaciones entre particulares se produce en un contexto de aumento del mercado de vehículos de ocasión, que subió un 4,9% en el 2006 y alcanzó 1.635.000 unidades. Por segundo año consecutivo, en España se vendieron más turismos usados que nuevos. La diferencia fue en el 2006 de 135.000 a favor de la segunda mano, según los datos de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos (Ganvam).

LOS CONCESIONARIOS Los particulares han sabido sacar mayor provecho de ese aumento de las ventas, ya que han pasado de 717.000 operaciones en el 2005 a 817.000 en el 2006, un 14% más. En cambio, el segundo canal en importancia en el mercado, el de las redes oficiales de concesionarios, han pasado de vender 576.000 coches en el 2005 a sumar 556.000 en el ejercicio pasado. El descenso en el volumen de operaciones ha causado una caída de la cuota de mercado de tres puntos, del 37% al 34%.

Las estadísticas también incluyen como venta entre particulares las realizadas con la presencia de algún intermediario considerado como empresa no alquiladora, pero no un profesional del motor, y que se limita a ofrecer los vehículos de un máximo de dos años, que suponen un 22% de las operaciones. El resto se realiza de forma más directa entre propietario y comprador a través de múltiples canales como internet, anuncios en publicaciones especializadas y los propios coches convertidos en anuncios y estacionados en calles concurridas. Las operaciones informales en la calle se resisten a los ataques legales y policiales que sufren. Los profesionales agrupados en Ganvam han actuado como lobi para erradicar lo que consideran "venta ilegal en la vía pública". Algunos ayuntamientos como Barcelona y Madrid prevén en sus ordenanzas municipales una multa y la retirada del coche cuando se produzca una ocupación intensiva de la vía y se trate de anuncios de empresas.

Los vendedores profesionales se concentran en la comercialización de vehículos de menos de tres años, que son los que todavía disponen de más valor en el mercado. Las flotas de empresas, los vehículos de renting y los de empresas alquiladoras son las principales procedencias de los coches vendidos en esos establecimientos. El presidente de Ganvam, Juan Antonio Sánchez Torres, lanza un mensaje claro a los profesionales del sector en la última memoria de la entidad: "Mentalización a todos los niveles, de la necesidad inexcusable de que nuestras empresas actúen dentro de la más exquisita ortodoxia y profesionalidad. En ello nos va el futuro".

Para Xavier Agustí, gerente de Fórmula Ocasión Quadis, el fuerte predominio de las ventas entre particulares "no ayuda a dar más prestigio a los profesionales", aunque advierte de que la distribución del mercado dependerá del servicio que ofrezcan. "Hay muchos clientes --indicó-- que están dispuestos a pagar un poco más por tener un buen servicio en la compra y disponer de un coche con garantía".

VALOR EMOCIONAL Pese al crecimiento del mercado de ocasión, Agustí advierte de que en España y los países mediterráneos hay aspectos culturales que los distancian de otros como el Reino Unido o Alemania, donde se venden el triple y el doble de turismos usados que nuevos. "Aquí pesa más el valor emocional de estrenar un coche que la racionalidad de comprar el mismo de ocasión más barato", indicó el directivo. En este campo, la aportación de los inmigrantes también se deja notar, ya que suman alrededor del 10% de las compras, unos 160.000 coches, que suelen ser de alta antigüedad y precios más bajos.