Las discretas subidas con las que ayer estuvo coqueteando la bolsa española durante la mayor parte de la sesión se chafaron de golpe en cuanto la bolsa neoyorquina abrió sus puertas y los inversores empezaron a recoger beneficios.

La jornada del Ibex 35 empezó con subidas de hasta el 0,60% que seguían saludando la determinación mostrada el viernes por la Reserva Federal para adoptar las medidas que sean precisas si aumenta el riesgo de recaída de Estados Unidos en una nueva recesión.

También celebraban los inversores españoles las noticias de Japón, donde su Gobierno ha anunciado nuevas medidas de estímulo para reanimar su anémico crecimiento. Después llegaron algunos buenos datos macroeconómicos sobre la mejora de la confianza de los consumidores en la zona euro y el aumento del gasto personal en Estados Unidos por encima de lo esperado (el 0,4% en julio). También se conoció alguna noticia que confirma que hay cierto movimiento en las operaciones corporativas (Intel compra a Infineon su negocio de telefonía móvil).

En todo esto estaba la bolsa española cuando Wall Street abrió sus puertas en negativo, y todo se vino abajo. El Ibex 35 cerró con un recorte del 0,12% para acabar en los 10.136 puntos. En Europa, con el euro a 1,268 dólares, las principales bolsas bajaron algo más: Fráncfort, el 0,65%; Milán, el 0,59%; París, el 0,58%, y el índice Euro Stoxx 50, el 0,52%. Londres cerró por festivo.

De los grandes valores del Ibex 35 solo subió Iberdrola, (el 0,49%). Las dos constructoras que lideraron las subidas la semana pasada, Ferrovial y OHL, anotaron nuevos repuntes, por encima del 1%, mientras que Abengoa lideró las pérdidas, con una caída del 1,37%. Técnicas Reunidas cedió el 1,03%; Endesa, el 0,89%, y Banesto, el 0,86%. En el mercado continuo, Befesa comandó las pérdidas con una caída del 5,38% tras presentar resultados del primer semestre, mientras Nyesa encabezó las ganancias con un alza del 5,18%.