El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, presentará mañana la estrategia integral del vehículo eléctrico, un plan de impulso a la movilidad eléctrica al que el Gobierno destinará 590 millones de euros en dos años.

La estrategia ha sido plasmada en un documento que contiene las líneas estratégicas para la implantación del vehículo eléctrico en España, con una previsión de 250.000 unidades, incluidos los híbridos enchufables, en el año 2014.

El Plan Estratégico Integral del Vehículo Eléctrico propone la creación de una nueva tarifa eléctrica para aprovechar las horas óptimas de la recarga y para el mejor rendimiento del sistema, según el borrador.

MEJORAR LA EFICIENCIA

En relación al programa de gestión de la demanda energética, uno de los pilares del plan, el documento justifica que el vehículo eléctrico supone una nueva demanda de energía que, gestionada de forma inteligente, ofrecerá al sistema eléctrico la posibilidad de mejorar su eficiencia global mediante el aplanamiento de la curva de la demanda.

Se explica en el borrador que es en estos valles de caída de la demanda cuando el coste asociado a la generación de electricidad es menor, con la circunstancia de que trasladar la demanda a esos momentos contribuye a incrementar la integración de las energías renovables, especialmente la eólica.

La estrategia planteada es la de favorecer el uso de la discriminación horaria entre los consumidores de la llamada tarifa de último recurso, es decir, la que poseen 22,7 millones de hogares y pymes cuya potencia contratada es igual o inferior a 10 kilovatios.

PUNTOS DE RECARGA

El plan recoge que en el año 2014 deberán existir 62.000 puntos de recarga en domicilios particulares, 263.000 en aparcamientos de flotas, 12.150 en estacionamientos públicos y 6.200 en vías públicas.

El impulso de la demanda y del uso del vehículo eléctrico es articulado en este plan en dos programas, uno dedicado a dar prioridad a las flotas, entre ellas las de las administraciones públicas, y otro, a la creación de ventajas urbanas, ya puestas en marcha en algunos municipios como Madrid, que ya permite el aparcamiento gratuito en las zonas reguladas.

Las adquisiciones, sean para flotas o particulares, serán apoyadas económicamente a través de ayudas directas para la compra, ya existentes, y por ventajas fiscales que compensen el esfuerzo de los primeros usuarios de estos vehículos, tanto desde la perspectiva económica, por su precio elevado, como desde la psicológica, por la incógnita que supone el uso de esta nueva tecnología.

COMPETITIVIDAD

Según el texto, el cálculo del incentivo necesario ha de permitir que este tipo de automóviles sea competitivo respecto al vehículo de combustión interna. El pasado Consejo de Ministros hizo referencia a un máximo de 7.000 euros por unidad.

El plan propone un acuerdo con la Federación de Municipios y Provincias para favorecer la homogeneidad de ventajas en todo el territorio del Estado, al tiempo que se facilitará una guía de introducción al vehículo eléctrico en las ciudades proponiendo una ordenanza municipal de apoyo a estos vehículos.