Las contradicciones en el Gobierno sobre un asunto tan delicado como la subida de la tarifa eléctrica en el 2007 ya se han hecho evidentes. El secretario de Estado de Comunicación del Gobierno, Fernando Moraleda, dijo ayer que el Gobierno garantizará que la subida no superará el índice de precios de consumo (IPC).

El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, ha decidido "frenar" el borrador de real decreto elaborado por Industria en el que se incluía una subida media del 10% de la tarifa (del 6% para los hogares, y del 15% para la industria).

ALARMA La subida para los hogares ha sido del 5,86% en el 2006, por lo que cuesta entender la alarma que ha causado en el Gobierno la filtración de este decreto el pasado domingo. Sobre todo, porque fue el propio Rodríguez Zapatero quien hace dos semanas abogó porque el precio de la electricidad reflejara, a partir de ahora, el coste de las materias primas como el petróleo. Es la misma tesis que predican el ministro de Industria, Joan Clos, y el vicepresidente económico, Pedro Solbes.

Fuentes de Industria también desmintieron ayer la cifra del 10% y dijeron que el departamento "está trabajando" en una metodología para calcular la subida de la tarifa doméstica, con el fin de que esté en torno al IPC. El Ministerio que encabeza Clos baraja establecer tramos de tarifa en función de la potencia consumida, de modo que la subida sea menor para hogares más modestos y "en promedio", en torno al IPC. El secretario de Estado de Economía, David Vegara, por su parte, reconoció que Industria "aún no tiene sobre la mesa" una propuesta definitiva. "Las cosas están como están y hay que esperar a ver cuál es la propuesta definitiva", aseguró.