El Periódico Extremadura ha sido a lo largo de los años reivindicativo con un tren digno para esta región. Sus informaciones, sus reportajes, sus artículos de opinión, su línea editorial en suma, ha sido clara a la hora de reivindicar lo que le corresponde a todos los extremeños, que no es otra cosa que igualarse al resto de territorios en cuanto a infraestructuras y servicios de calidad. Un medio de comunicación como El Periódico Extremadura, con casi 95 años de historia a sus espaldas, ha visto y contado muchas noticias con respecto al ferrocarril y ha denunciado los agravios que en este sentido se han producido año tras año, sobre todo desde que se nos prometió a los extremeños la Alta Velocidad ferroviaria (AVE) para el año 2010 y después de casi ocho años seguimos a la espera mientras el resto del trazado convencional se deteriora hasta el extremo. Todos hemos visto y leído en los últimos meses averías continuas, retrasos casi a diario y trenes sin servicios mínimos de calidad.

Un periódico es reflejo de cuanto ocurre en su territorio, espejo de sus gentes y muestra inequívoca de la verdad. Por eso, el tren y su reivindicación han ocupado siempre su espacio, entendiendo que sin unas infraestructuras de transporte modernas es imposible competir en igualdad de condiciones y denunciando que, en ocasiones, esta reivindicación se ha convertido en arma política o estrategia de asalto entre las diferentes fuerzas políticas.

Es justo reconocer que es en estos momentos cuando el Ministerio de Fomento más está haciendo por acelerar la mejora de nuestras infraestructuras. Sin embargo, es verdad que la demora ha provocado en la sociedad civil una protesta unánime rozando el hartazgo. Por eso, hay que aprovechar su reivindicación conjunta y coordinar su efectividad. No es una guerra de unos contra otros, es una exigencia común que no puede tener matices políticos ni aprovechamientos interesados para desviar la atención sobre otros problemas. En este sentido, la petición por ‘un tren digno ya’ emanada del pacto por el ferrocarril y a la que se están adhiriendo diferentes colectivos la hemos hecho propia hasta el punto de sellar un compromiso de apoyo a la manifestación del 18N en Madrid siempre y cuando se desarrolle por cauces justos y objetivos. Eso quiere decir que la sociedad civil deberá liderar esta reivindicación, dejando que la política esta vez dé un paso atrás. Será la forma de hacerla efectiva de una vez por todas e implicarnos a todos.