La ejecución del AVE en el plazo marcado y la puesta en marcha de las nuevas autovías son dos de los más importantes compromisos del Plan Extremadura aún por culminar. Mientras, cuestiones como la aportación para el Plan de Empleo, la construcción de cuatro centros tecnológicos, los planes de reforestación o las obras hidráulicas están en concluidos o muy avanzados. Para el próximo periodo, Fernández Vara pedirá a Zapatero que el Gobierno ponga un euro por cada dos invertidos por la Junta en la segunda transformación que propugna para Extremadura.

Impulso al AVE y el nueva mapa viarioEl grueso de las inversiones contempladas en el Plan Extremadura encuadraba todas las inversiones referidas a las infraestructuras. En este apartado, el Gobierno ha concluido como comprometió la Autovía de la Plata en todo el recorrido extremeño, con la apertura del último tramo hace unos pocos días.

En el horizonte inmediato la actuación donde está puesto el foco es el tren de alta velocidad. Durante la pasada legislatura los principales avances han sido la definición del modelo mixto, la culminación de los estudios ambientales para todo el trazado --incluido el polémico Madrid-Talayuela-- y el inicio de las obras en algunos tramos.

Sin embargo, aún queda mucho por hacer. Sólo un trazado de 20 kilómetros (Montijo-Badajoz) está en obras. En otro (Montijo-Mérida) están a punto de empezar. Mientras, están licitadas las obras del Aldea del Cano-Mérida y a punto de licitarse las de Cáceres-Aldea del Cano.

Queda en todo caso mucho por avanzar: todo el trazado entre Cáceres y Talayuela, donde aún no hay proyecto y las entradas en las ciudades, todavía por definir. El plazo anunciado para la puesta en marcha, el 2010, parece muy improbable de cumplir. De hecho, los presupuestos estatales marcan el 2012 como fecha de conclusión. En cualquiera de los dos casos se requiere un esfuerzo notable de inversión para culminar una obra que cuesta alrededor de 3.000 millones.

En el apartado de autovías, la Trujillo-Cáceres ya está en obras, y se concluirá en el 2011. Para esta legislatura deberían arrancar por fin la Zafra-Huelva, Mérida-Ciudad Real y Badajoz-Granada, además de definirse el trazado de la Cáceres-Portugal.

Igualmente, y como compromiso que no figuraba inicialmente en el plan pero que fue incorporado con posterioridad, debe definirse el convenio que permita que la Junta acometa la conversión en autovía de la carretera que une Cáceres con Badajoz, pero que esta obra sea incluida en los presupuestos del Ministerio de Fomento para que la inversión retorne a las arcas del Ejecutivo extremeños.

En marcha los cuatro centros tecnológicos

El desarrollo de los centros tecnológicos nacionales acordados por Junta y Gobierno es uno de los puntos donde más se ha avanzado.

De este modo, el Centro Nacional de Aplicación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (CENATIC), dependiente del Ministerio de Industria, ya tiene abierta su sede en Almendralejo, desde donde se centralizan las iniciativas relacionadas con el desarrollo y difusión de las tecnologías basadas en fuentes abiertas.

Por lo que se refiere al Centro Extremeño de Tecnologías Avanzadas (CEMAT) ubicado en Trujillo, ya cuenta con una sede provisional en el ayuntamiento trujillano. Mientras, se está a punto de concluir la obra de adaptación de la sede definitiva, que podrían estar listas a la vuelta de un mes. Luego sólo faltaría que la Junta extendiese la conexión por fibra óptica hasta el centro para que empezase a funcionar.

En cuanto al Centro Nacional de Investigación del Cerdo Ibérico, que estará en Zafra, se prevé que la obra, que ha costado 1,2 millones esté terminada en pocas semanas. Caso similar es el del Centro Nacional I+D de Agricultura Ecológica, con sede en Plasencia. En este caso las obras estarán finalizadas hacia octubre y noviembre y el centro podrá abrir sus puertas a principios del próximo año.

Plataforma logística, industria y empleo

Otro de los anuncios estrella del Plan Extremadura fue la Plataforma Logística del Suroeste. Esta iniciativa ha ido creciendo tanto en tamaño como en volumen de inversión, de manera que las cifras cerradas finalmente fueron de 120 millones de euros para configurar un espacio de 530 hectáreas.

Hasta ahora los avances han venido del lado de los trámites previos, como constitución de la entidad gestora (a cuyo frente estará el extremeño Javier Corominas), la disponibilidad del suelo o la necesidad de conocer los planes de Fomento respecto a la estación pacense del AVE.

Concluidos estos trámites ya se está en disposición de iniciar en breve la urbanización de los terrenos, y podría estar disponible a la vuelta de un año o año y medio. En todo caso, SEPES ya advierte que esta plataforma alcanzará su máxima operatividad tres años después de que el AVE sea una realidad.

Respecto a la industria, el compromiso de Zapatero fue reformar la norma de incentivos industriales para que tuvieran de nuevo cabida proyectos de agroindustria, sector que había sido marginado de las subvenciones pese a su gran relevancia en el tejido productivo y la modernización agrícola extremeña. Este compromiso está cumplido.

En cuanto al empleo, el acuerdo fue que el Gobierno central aportara 20 millones anuales para el fomento de actuaciones que permitieran bajar la tasa de paro. Esta partida fue incrementada posteriormente hasta los 25 millones por año y se prorrogó su vigencia de los dos años iniciales a tres. Todo apunta a que los apoyos continuarán en términos similares a lo largo de esta legislatura.

Deuda histórica y otros compromisosDentro de la exigencia de que el Gobierno central reconozca el esfuerzo que Extremadura ha venido haciendo para superar sus deficiencias de décadas, la Junta logró que se fijasen criterios para solventar Deuda Histórica. El trámite previo es la evaluación de esta deuda, donde Extremadura quiere que se incluya no sólo la diferencia que pueda haber ahora respecto a otras regiones, sino el esfuerzo adicional que se ha tenido que realizar para llegar a este punto.

En este momento, se está en proceso de definición de cantidad y plazos, que serán incluidos en el nuevo Estatuto.

Otros acuerdos en proceso de ejecución son el plan de reforestación, dotado con 56 millones de euros, y el plan de caminos rurales, para el que se están firmando anualmente los oportunos convenios.

En cuanto a las nuevas incorporaciones, que abundan en la mejora de abastecimientos y depuración, aún están en fase de definición.

Peticiones para el nuevo periodo

La misma noche electoral, el presidente de la Junta anunció que pedirá una reunión con Rodríguez Zapatero en cuanto este sea investido para plantearle nuevas incorporaciones que den continuidad al Plan Extremadura. Estas peticiones irían enfocadas a que el Gobierno central siga apoyando a la región, y más en un periodo tan decisivo como el que ahora se abre, posiblemente el último en el que Extremadura cuente con fondos de la UE.

Para ello ya cuenta con un primer compromiso manifestado hace unos pocos días por Zapatero: su Gobierno apoyará la refinería extremeña, uno de los pilares de la industrialización para los próximos años.

Pero Fernández Vara quiere ir más allá. Quiere, y así lo planteará en la reunión prevista, que Zapatero haga suyo el plan diseñado a ocho años que contempla inversiones por 19.250 millones de euros. La propuesta es que el Gobierno central ponga 6.900 millones, de manera que Extremadura aportaría dos euros de sus arcas por cada euro que pusiera el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero.