En estas horas poselectorales, los canarios miran más a Ferraz y a Génova, sedes centrales de socialistas y populares, que a los resultados electorales. El interés general del PSOE y el PP prima sobre el de los electores y los dirigentes del archipiélago, que se puede convertir en moneda de cambio entre los dos grandes partidos. Lo dejó caer ayer Rajoy: que gobierne el partido más votado. Es decir, en Canarias, el PSOE, y en Navarra, UPN, la marca de los populares en esta comunidad. Habrá que esperar algunos días para saber quién va a presidir el Gobierno autonómico no solo por lo embrollado de la situación sino porque, además, mañana es el Día de Canarias.
