--Los premios de la música que os otorgaron fue en Badajoz. ¿Qué sentís al volver a Extremadura, en este caso para tocar en uno de los festivales de música ´indie´ más populares? --Lo que nos gusta es tocar, más que recoger premios. En este caso, es un festival brutal, muy conocido, estamos encantados de poder estar ahí con toda la gente. Tiene muy buen cartel, un buen público. Es una buena oportunidad de ir a Extremadura a lo grande.

-- ¿Cuál es vuestra opinión sobre esta cita que describen como familiar, por su público reducido y peculiar por estar situado en la ladera del Castillo de Luna? --Poder tocar en este festival ya es un placer. No sé si es más pequeño o no, porque la repercusión a nivel de medios que tiene, toda la información que nos llega de él es como si estuviera a la altura de cualquier otro festival, con un gran prestigio en España.

--¿Cómo lleváis la gira tan movida que estáis teniendo? --Llevamos de gira un año y medio. Está siendo una experiencia inolvidable. A nivel mediático, en este tiempo, ha sido cuando más se nos ha visto y esto nos ha hecho muy felices porque era lo que queríamos, compartir nuestra música.

--Si tuviérais que escoger un directo, ¿con cuál os quedaríais? --En esta gira ha habido muchos impactantes. Todos, absolutamente todos, hasta el más insignificante tienen la misma importancia. Quizás el que recordamos como el más especial es el que dimos en abril del año pasado en la Joy, en Madrid, donde acabamos de sacar nuestro vídeo. Fue algo muy bonito, de fuertes emociones, había gente que nos había estado apoyando desde el principio, por fin habíamos conseguido un disco, la gente estaba muy orgullosa de nosotros.

--¿Qué aceptación creéis que vais a tener, ya que sois uno de los platos fuertes del festival? --Nosotros lo que tenemos que hacer es olvidarnos un poco de eso y tocar bien, meternos en el escenario, disfrutando de ese momento, ya que tienes una hora y media para deleitar al público con tus canciones. Si lo hacemos bien, conectaremos con el público y esperamos que así sea. En nuestra gira ha ido ocurriendo así y esperemos que en el Contempopránea así sea.

--¿Cómo estáis viviendo este sueño, el salto a la fama? --Se sigue en una vida mucho más normal de lo que pueda parecer. Seguimos estando los seis juntos, comemos juntos, salimos juntos, lo que hacíamos hace ya dos años. La diferencia grande es que ya no trabajamos en otros trabajos, entonces, lo que más ha cambiado es nuestra ocupación. Vemos el éxito por fuera, pero dentro del grupo no se siente mucho, la verdad.

--El nombre de Vetusta Morla viene de la tortuga gigante de la Historia Interminable, que optó por creerselo justo para no convertirse en nada. ¿Qué tiene que ver con vosotros? --El nombre ha ido dando forma al grupo, según han pasado los años. En un inicio el nombre no tenía ese paralelismo que tiene hoy. Con el tiempo hemos ido teniendo cosas en común, porque es un cuento en el que se mezclan dos verdades, la realidad y la fantasía y es lo que sentimos a la hora de escribir las letras y la magia que tiene la vida cotidiana. Nos hemos sentido muy ligados, pero también la manera en la que hemos ido evolucionando, ya que hemos tardado mucho tiempo, como las tortugas, en crearnos una identidad y girar por España.

--´Un día en el mundo´ es un álbum resumen de nueve años de esfuerzo por cuidar la letra, de buscar una identidad. ¿Estáis realmente satisfechos? --Ya merecía la pena justo después de grabarlo, no ha hecho falta ni premios, ni una gira, porque el objetivo final era grabar un gran disco. Lo conseguimos y ya estábamos contentos, todo a partir de ahí ha sido añadido.

--Si tuviérais que escoger una canción de todas, ¿cuál tendría el privilegio de ser la favorita? --Es imposible elegir una. Es como decirle a una madre que escoja a uno de sus hijos. ´Un día en el mundo´ es completo, la mañana, la tarde, la noche, si quitáramos algunas canciones, sería quitarle un trozo al día.