La Audiencia Nacional condenó ayer a 30 años de cárcel al exdirigente de ETA Juan Antonio Olarra Guridi por ordenar a los miembros del comando Andalucía que asesinaran al fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de esa comunidad autónoma, Luis Portero. Los etarras Harriet Iragi y Jon Igor Solana cumplieron la orden el 9 de octubre del 2000. Portero fue asesinado en Granada por los terroristas, que le aguardaron en las escaleras interiores del portal del su casa, donde recibió dos disparos en la cabeza.

La sección segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional condenó a Olarra a indemnizar a la viuda y a los cuatro hijos de la víctima con un total de 900.000 euros, cantidad que había exigido la acusación particular y que supera en 250.000 euros lo reclamado por el fiscal.

La sentencia considera probado que Antonio Olarra Guridi era el responsable del comando Andalucía durante el 2000 y que "manejaba" a los ya condenados Iragi y Solana, a quienes les facilitó fotografías de Portero, sus horarios de trabajo, su domicilio y datos del coche oficial en el que se desplazaba.