La Audiencia Nacional censuró ayer la actuación del fiscal Ignacio Gordillo y de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) por no haber aportado en el juicio contra Gregorio Vicario Setién por el secuestro del industrial José María Aldaia (mayo del 2004-abril del 2005) la prueba de cargo necesaria para condenarle. Los jueces absuelven al etarra-- que será entregado a Francia el próximo enero-- porque la fiscalía y la acusación popular solo presentaron en el juicio la declaración de dos coimputados. Para el tribunal ese testimonio es insuficiente para condenar tal y como establece el Supremo y el Constitucional.
La Audiencia Nacional sacó los colores al fiscal y a la acusación popular --que pidieron la máxima pena-- porque no aportaron en el juicio una prueba de ADN que se obtuvo del acusado en una maquinilla de afeitar negra encontrada en el zulo en el que fueron recluidos Aldaia y Cosme Delclaux.
La sala comunicó a las acusaciones pública y popular este dato el pasado 11 de septiembre. Sin embargo, ninguna hizo uso de ese informe durante la vista. Por ello, los jueces optan por absolver a Vicario Setién por falta de pruebas.
La Audiencia también absuelve, en otras dos sentencias, a José Luis Beotegi y Miguel San Argimiro por falta de pruebas.
