Mohamed Ghaleb Kalaje, el presunto financiero de la red española de al Qaeda, negó ayer haber financiado a personas o entidades vinculadas con el terrorismo islamista, como sostiene el fiscal.

El acusado, que se enfrenta a una petición de nueve años de cárcel por pertenencia a una organización terrorista, admitió ante el juez que mandó dinero a varios imputados, entre ellos Mamoum Darkanzali, detenido en Alemania por su presunta relación con la célula suicida que perpetró los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos, pero aseguró que lo hizo en algunos casos por negocios, y en otros, por caridad.

ESTUDIAR EN SIRIA Kalaje se presentó ante el tribunal como un próspero hombre de negocios. Su familia le mandó de Siria a España a estudiar porque "tenía medios". Después, se marchó nueve años a Arabia Saudí donde dijo haber ganado "mucho dinero" --sin concretar cómo-- y en diciembre de 1998 regresó a Madrid. Entonces conoció al presunto jefe de la célula española de al Qaeda, Iman Eddin Barakat, Abú Dahdah .

Un año después de su regreso a España, en 1999 discutió con él y con otro de los 24 procesados en esta causa, Yossuf Galán, por mantener criterios distintos sobre la yihad. "Hubo tensión, dijimos palabras fuera de lo normal", explicó. Según su versión, Abú Dahdah le recriminó no ser un buen musulmán.

El tribunal denegó la libertad a Ghasoud Al Abrash Ghayoun, acusado de grabar 12 horas de vídeo de su viaje a Nueva York --él asegura que tomó las imágenes como un turista más--, porque todavía quedan muchas pruebas por practicar.

DETONADORES DE BOSNIA Por otra parte, un alto mando de la policía de Bosnia, Dragomir Andan declaró ayer que los detonadores utilizados en los atentados terroristas del 11 de marzo del 2004 en Madrid fueron fabricados en ese país, informa France Press.