Los tres miembros del comando Barcelona , Fernando García Jodra, Unai López de Ocariz, y Nerea Bengoa Ciarsolo, y los colaboradores de ese grupo, Peru Alvarez de Mendía y Juan Ramón Rodríguez, alias Marc , admitieron ayer en la Audiencia Nacional su pertenencia y relación con ETA. Ellos se autodenominaban comando Gorbea .

El fiscal solicitó 35 años de cárcel para los miembros del comando por los delitos de integración en organización terrorista, depósito de explosivos y de armas de guerra, falsificación continuada de placas de matrícula y de documentos de identidad y tenencia ilícita de armas.

Además, rebajó su petición inicial de nueve años a cinco para los colaboradores. El ministerio público subrayó que éstos tenían intención de ayudar a los miembros del comando, ya que recabaron informaciones sobre posibles objetivos. Sin embargo, sus datos no llegaron a ser utilizados porque la policía desarticuló al comando en agosto del 2001, sin que llegara a cometer ningún atentado.

Marc , excantante del grupo catalán Kop, fue extraditado en octubre a España desde Holanda.

La defensa de los acusados aceptó la petición del fiscal para cuatro imputados y reclamó una rebaja para Bengoa, alegando que esta terrorista ya había sido condenada por pertenencia a ETA cuando fue detenida en 1995 como miembro del comando Araba . El fiscal recordó que Bengoa huyó a Francia en el 2000, antes de ser condenada.