Policías secretos franceses y españoles podrán trabajar en operaciones concretas en el seno de los servicios de información de los dos países para luchar contra la amenaza islamista. Al igual que en la lucha contra ETA, las fuerzas de seguridad de Francia y España se han aliado para atajar el yihadismo, en especial en las comunidades de riesgo.

Los presidentes José Luis Rodríguez Zapatero y Nicolas Sarkozy darán este paso en la colaboración contra el terrorismo el martes, al firmar un acuerdo que dotará de marco jurídico a todas esas operaciones policiales, que siempre se someterán a la legislación del país donde se desarrollen. El líder conservador llegará el lunes a Madrid para hacer su primera visita de Estado, que rematará al día siguiente con una cumbre bilateral.

Ambos países establecerán, además, un procedimiento de alerta recíproco con la información que recaben de manera individual, sobre todo teniendo en cuenta el uso que hacen los islamistas de internet. Las fuerzas de seguridad se intercambiarán copias de los dispositivos informáticos de que se incauten en las redadas para obtener la máxima cantidad de información en un plazo útil, una premura especialmente necesaria en este tipo de terrorismo.

Francia cuenta con más experiencia en la lucha contra el yihadismo por la gran cantidad de argelinos y marroquís que viven en el país desde hace décadas por razones históricas. Las fuerzas de seguridad francesas disponen de numerosos agentes magrebís en sus filas.

PERSECUCIONES MARITIMAS Ahora, la policía secreta española se apoya fundamentalmente en los datos que le proporcionan los confidentes, un canal de información útil pero que resulta incomparable a la labor que puede desarrollar un agente policial, en este caso francés, que se infiltre y trabaje en las zonas con mayor presencia de inmigrantes de países árabes.

Esta estrecha colaboración entre los dos países aspira a lograr los mismos éxitos que en la lucha contra ETA, imitando los métodos de trabajo. El acuerdo se ampliará al tráfico de estupefacientes, que contará asimismo con grupos conjuntos. El documento dará libertad a la policía para entrar en las aguas del otro y atrapar las embarcaciones que transportan droga.

La luna de miel que viven las dos capitales y sus líderes no se ha visto enturbiada por la frase atribuida a Sarkozy sobre la limitada inteligencia de Zapatero --le situó entre los dirigentes poco brillantes pero que ganan elecciones--. "Tengo muy buena relación con Sarkozy y sé que todos los comentarios que ha podido hacer sobre mí eran positivos", declaró a Le Monde.