LOS AFORADOS

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, afirmó ayer que no reclamará a los tres diputados madrileños implicados en el caso Correasu acta porque el escaño es personal, aunque reconoció que los tres han puesto su militancia política a disposición del PP. Aguirre afirmó que ni el PP "ni nadie" puede obligar a los parlamentarios regionales Alfonso Bosch (ya imputado por el juez), Benjamín Martín Vasco y Alfredo López Viejo a dejar su escaño en el Parlamento madrileño, ya que "este acta se la ha dado el pueblo cuando ha votado".

LA CONVERSACION

Además, Aguirre criticó a la policía judicial, al culparla de haber filtrado a El País una conversación que demuestra la gran amistad entre el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, y el responsable de las empresas de Francisco Correa en la Comunidad, Alfredo Pérez, alias el bigotes. La popular dijo que las conversaciones telefónicas transcritas no aparecen en el sumario del caso, que ha publicado el Tribunal Superior de Justicia de Valencia (TSJV); por eso culpó a la policía judicial de la filtración.