El Ayuntamiento de Madrid es el feudo más emblemático del PP, donde gobierna con comodidad desde hace 24 años, cuando José María Álvarez del Manzano consiguió una alcaldía que fue revalidada por Alberto Ruiz-Gallardón y heredada por Ana Botella. Nadie consiguió hacerles sombra, ni siquiera tras los graves azotes de la crisis en la capital. Ahora, por primera vez en más de dos décadas, los estudios demoscópicos señalan que las fuerzas de izquierda tienen posibilidad de dar un vuelco a la situación y arrebatar el Ayuntamiento a los populares.

Eso es lo que va a tratar de hacer Ahora Madrid, el proyecto político que surge de Ganemos Madrid, una candidatura de unidad popular inspirada en Barcelona en Comú, y que se ha presentado este viernes a mediodía en la capital, con la suma de partidos políticos como IU, Podemos y Equo, además de un sinfín de pequeñas plataformas y asociaciones. Todos han tenido la audacia de echar tierra sobre sus diferencias para converger y aprovechar una oportunidad histórica, pero el ingenio de la operación tiene efectos colaterales que pueden hacer saltar por los aires el tablero político de Madrid.

El primero de los riesgos viene dado por el nombre que podría encabezar Ahora Madrid, Mauricio Valiente, ganador de las primarias de IU al Ayuntamiento, miembro del sector crítico de la federación y ariete de la excandidata Tania Sánchez. El nuevo partido, que ya está inscrito en el registro del Ministerio del Interior, iniciará la próxima semana el trámite de las primarias para elegir su cabeza de cartel y los equipos. Valiente debería participar en este proceso si quiere liderar Ahora Madrid, pero si lo hace rompe las reglas impuestas por la dirección regional de IU, a la que está enfrentado, y que le ha llegado a amenazar con la expulsión si se adhiere a otro partido que no incorpore las siglas IU.

REFERÉNDUM

Ante las divergencias, la federación de izquierdas ha decidido que el próximo sábado se vote en referéndum si se presentan a las elecciones municipales con el paraguas Ahora Madrid y renuncian a su propia marca. Si la respuesta es favorable, Valiente tendría un día --hasta el domingo-- para presentar su candidatura al nuevo partido. Pero la pregunta es otra. ¿Qué sucede si de esa consulta sale un 'no'?. De momento, nadie tiene la respuesta preparada.

En la rueda de prensa de presentación del partido solo han comparecido portavoces, y ninguno de los responsables políticos, y se han limitado a decir que esta decisión incumbe a IU. Si Valiente decidiese jugarse la expulsión y concurrir con Ahora Madrid, dejaría a la fuerza de izquierdas desmantelada en el ámbito municipal justo en un momento clave y obligaría a la celebración de unas nuevas primarias para elegir candidato en la federación.

Podemos juega con menos presión en esta plaza, puesto que ninguno de sus líderes más relevantes tiene previsto comprometer su nombre en la candidatura, mientras que Equo apostará previsiblemente por la figura de su portavoz, Inés Sabanés.

AGUIRRE Y CAMACHO

En el resto del tablero político de Madrid hay piezas fundamentales que todavía están por elegir. O por lo menos, pendientes de oficializarse. Mariano Rajoy no ha designado candidato al Ayuntamiento, aunque todo apunta a que la elegida será la presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre, bien posicionada en las encuestas del partido y con muchas horas de vuelo en el barro de la capital. Frente a ella estará el candidato del PSM, Antonio Miguel Carmona, que defendió al líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, tras su expulsión.

De los resultados de Carmona y Ahora Madrid, pero sobre todo de la capacidad de ambos para tender puentes, va a depender en gran medida el futuro del Ayuntamiento de la capital.