La alcaldesa de Lizartza, Regina Otaola, del Partido Popular, presentó ayer una denuncia ante la Ertzaintza por haber recibido una amenaza verbal de muerte. Con motivo de las fiestas del municipio guipuzcoano, Otaola izó las banderas española, vasca y local en el balcón consistorial.
Fue entonces cuando simpatizantes de la formación aberzale Acción Nacionalista Vasca (ANV) que protestaban por la presencia de la bandera española gritaron "de todo", según explicó la alcaldesa, y en concreto uno la amenazó: "Vas a morir".
No fue el único incidente en el que se vio implicada la fuerza aberzale. En Pamplona, la alcaldesa, Yolanda Barcina, dijo ayer que la acción de los ediles de ANV de ocultar la bandera española el jueves antes de una rueda de prensa es, además de "una burla a la democracia", una "infracción".
Barcina recordó a los concejales de ANV que "hay que cumplir las leyes y respetar los símbolos" y anunció que el consistorio regulará el uso de la sala de prensa para que la normativa "sea respetada por todos los que la quieran usar".
