Las dos explosiones registradas esta madrugada en las cercanías de la embajada de España y el consulado de Colombia en Caracas han causado heridas por cortes de cristales a tres personas, según el director de los servicios sanitarios del municipio de Chacao, Alexis Jimenez.El herido cerca de la legación diplomática española es el vigilante de un edificio adyacente, y los dos en las inmediaciones del consulado colombiano son personas que transitaban por el lugar, ha dicho Jimenez.Fuentes de la embajada española han informado de que ningún funcionario o trabajador de la legación diplomática ha resultado lesionado, pero que las ventanas y parte de la fachada sufrieron desperfectos.Vehículos destrozadosLas detonaciones han sucedido alrededor de las 02.30 local(07.30 hora española) y ha producido daños materiales en locales cercanos, y destrozaron algunos vehículos aparcados en los alrededores, informa la emisora de televisión Globovisión.La puerta del aparcamiento de la Agencia Española de Cooperación Internacional e Iberoamericana, vecina a la embajada, ha resultado dañada a consecuencia de la deflagración.Ambas representaciones están ubicadas en el sector este de la capital venezolana, en una zona compartida por edificios de oficinas y apartamentos de vecinos.En el lugar de los hechos aparecieron algunos panfletos firmados por el Movimiento Bolivariano, en apoyo de la revolución que lidera el presidente de Venezuela, Hugo Chávez.Durante su último programa dominical, Aló Presidente, Chávez pidió a los gobiernos de España, Estados Unidos y Colombia, que respeten la soberanía venezolana y que no interfieran en los asuntos internos de su país.Chávez también pidió moderación en sus declaraciones al secretario general de la OEA, Cesar Gaviria, quien desde el pasado 8 de noviembre dirige la "mesa de negociación" entre Gobierno y oposición, en busca de una salida pacífica, democrática, y constitucional al conflicto venezolano. Preocupación políticaLa semana pasada la ministra española, Ana Palacio, expresó su preocupación por la detención del jefe de la patronal venezolana, Fedecámaras, Carlos Fernández, acusado de instigación a delinquir y rebelión civil.Fernández, uno de los líderes del reciente paro general en Venezuela, ha sido puesto bajo arresto domiciliario a la espera de que la fiscalía ratifique los cargos y poder enjuiciarlo.Autoridades colombianas por su parte han realizado declaraciones criticando la falta de vigilancia venezolana en su frontera con Colombia y las facilidades de la guerrilla de ese país para traspasar la demarcación fronteriza.