El presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, ha anunciado que abandonará la política activa al finalizar la actual legislatura para incorporarse a su antiguo puesto de trabajo en una entidad de ahorro. Negó, no obstante, que la decisión obedezca a las "presiones judiciales y políticas" que sufre por su negativa a disolver el antiguo grupo parlamentario de Batasuna.

Sobre su complicada situación procesal, a la espera de que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) decida sobre un presunto delito de desobediencia al Tribunal Supremo por no disolver el grupo Sozialista Aberzaleak (la antigua Batasuna), Atutxa aseguró que "jamás de los jamases" ha pensado en dimitir de su cargo.

"Ha llegado el momento de dar carpetazo, de cerrar mi trayectoria política, dejar paso a gente nueva y dedicarme a otras cosas más entrañables, a nivel de entorno familiar", considera en una entrevista publicada ayer por el diario El Correo. "Me voy porque quiero", asegura.

Atutxa confiesa asimismo que está "muy tranquilo" ante el proceso judicial iniciado "incomprensiblemente" contra los miembros de la Mesa del Parlamento vasco.