El pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha decidido hoy, por doce votos a cuatro, mantener al etarra José Ignacio de Juana Chaos en prisión preventiva y hospitalizado, y ha dispuesto que se le alimente forzosamente si los médicos lo consideran necesario.De este modo, el pleno ha rechazado la petición del fiscal Fernando Burgos de decretar la prisión atenuada de De Juana en su domicilio, bajo vigilancia policial, y ha atendido la solicitud de la Asociación de Víctimas del Terrorismo de mantenerle en su situación actual y de ordenar su alimentación forzosa.La decisión ha sido adoptada por doce votos a favor y cuatro en contra, los de tres magistrados de la sección primera --la que condenó a De Juana a 12 años y medio por amenazas terroristas--, Manuela Fernández de Prado, Ángel Hurtado y Carmen Paloma González Pastor, y el de otra juez de la sección tercera de la Sala de lo Penal, Clara Bayarri, han informado fuentes jurídicas.Votos particularesEstos cuatro magistrados han anunciado en la reunión del pleno, que se ha prolongado durante cerca de hora y media, que emitirán sendos votos particulares en la resolución en la que se plasmarán los fundamentos jurídicos en los que se basa la decisión adoptada hoy sobre De Juana. El ponente será el magistrado Ricardo Rodríguez, presidente del tribunal que juzgó al preso etarra el pasado noviembre.Los jueces justifican su decisión con el argumento de que la decisión de ponerse en huelga de hambre ha sido voluntaria y no existe ningún elemento nuevo que determine modificar su situación penitenciaria.Cabe recurso de súplicaPara adoptar esta determinación, el pleno se ha erigido como tribunal de justicia, lo que se conoce como pleno jurisdiccional, por lo que cabe recurso de súplica ante el mismo órgano que ha acordado no modificar la prisión de De Juana. El etarra se encuentra en prisión preventiva a la espera de que el Tribunal Supremo revise la sentencia de la Audiencia Nacional que le condenó por amenazas.El fiscal abogaba por la prisión atenuada por tratarse de un preso preventivo, al no ser aún firme su condena, y porque aseguraba que no se podía volver a ordenar por tercera vez la alimentación forzosa, medida que ya fue adoptada el pasado año en otras dos ocasiones en que De Juana estuvo en huelga de hambre en protesta por no haber sido excarcelado tras extinguir sus numerosas condenas como autor de 25 asesinatos.