La audiencia previa del juicio civil por el accidente del Yak-42 en Turquía, en el que murieron 62 militares españoles, se celebrará el próximo miércoles en el juzgado de primera instancia número dos de Zaragoza, ha informado a EFE uno de los abogados de las familias, Javier Fernández.
Esta audiencia previa da comienzo a un proceso que ha tenido que repetirse, ya que la Audiencia de Zaragoza anuló el pasado mes de octubre las actuaciones realizadas hasta ese momento, al considerar que no se emplazó correctamente a la compañía contratista del avión, Chapman Freeborn, por lo que no se garantizó su legítima defensa.
El accidente del Yak-42 tuvo lugar el 26 de mayo de 2003 en Turquía, y en el mismo murieron 62 militares que volvían a España después de una misión humanitaria en Afganistán.
El primer juicio civil por este caso se celebró en una sala especial habilitada en la Feria de Zaragoza los días 24 y 25 de enero de 2006 y, en el mismo, las familias solicitaron unos 60 millones de euros en indemnizaciones a la compañía aérea Ukranian Mediterranean Airlines (UM Air), a la contratista del vuelo Chapman Freeborn y a la reaseguradora Busin Joint-Stock Insurance.
El titular del juzgado de primera instancia número 2 de Zaragoza, Ángel Dolado, condenó a las tres empresas responsables del vuelo Yak-42 a pagar una indemnización global de más de 10 millones de euros a los familiares, que éstos consideraron estaban muy lejos de lo que pedían.
Por ello, presentaron recursos de apelación, al igual que las empresas condenadas, ante la Audiencia Provincial de Zaragoza que anuló las actuaciones realizadas en el juicio contra la empresa Chapman Freeborn, al considerar que no se emplazó correctamente a la compañía, que era la contratista del avión.
Así, el miércoles comienza un nuevo proceso que culminará con la celebración de un nuevo juicio, previsiblemente en el mes de octubre, según el letrado Javier Hernández, quien ha indicado que las familias tienen el ánimo "bien" aunque "están cansados", después de un proceso tan largo.
La juez Amalia Sanz, titular del juzgado número uno, será la encargada de seguir este caso después de que la Audiencia de Zaragoza estimara el escrito presentado por Chapman Freeborn en el que solicitaba la recusación del juez Ángel Dolado Pérez por "carencia de imparcialidad".
