La Delegación del Gobierno en La Rioja ha recibido ya 600 solicitudes de indemnización por los daños provocados por el coche bomba de ETA que explotó junto al cuartel de la Guardia Civil en Calahorra el pasado viernes.

A pesar de que ayer era un día festivo, la unidad de Protección Civil recogió un centenar de peticiones más por parte de los vecinos de la localidad riojana que han sufrido desperfectos en sus enseres, viviendas o vehículos.

Por su parte, los vecinos de los cuatro inmuebles desalojados regresaron ayer a sus casas para recoger más pertenencias, aunque en un principio no se había previsto que fueran a hacerlo ayer. Sin embargo, las numerosas peticiones provocaron que voluntarios de Protección Civil les acompañaran, ya que se prevé que los damnificados no volverán en meses.