El ex presidente del Gobierno José María Aznar dijo hoy que el "Espíritu de Ermua" ha vuelto a ser traicionado y que ETA "ha visto como se abría una vía para escapar a su derrota en virtud de un cálculo oportunista y falso" del Gobierno de la Nación.

Aznar, que recibió en Bilbao el X Premio de la Fundación Miguel Angel Blanco, apuntó a "la ocultación" de las negociaciones con ETA y Batasuna" como lo que ha propiciado la traición al "Espíritu de Ermua", forjado entre los partidos tras el asesinato del edil popular en esa localidad vizcaína, hace ahora 10 años. "Había que ocultar una negociación que se estaba iniciando cuando se firmaba el Pacto por las Libertades", manifestó el ex presidente del Gobierno sobre el inicio de las negociaciones con ETA por parte del Gobierno de José Luis Rodriguez Zapatero.

José María Aznar, que preside en la actualidad la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales, FAES, culpó a los partidos nacionalistas que firmaron el Pacto de Estella, en 1998, un año después del asesinato de Blanco, de la primera "traición" al "Espíritu de Ermua". "Ahora, insisto, ha vuelto a ocurrir. De nuevo, ETA ha visto como se abría una vía para escapar a su derrota en virtud de un cálculo oportunista y falso, pero no de un partido que se define a sí mismo como extraconstitucional, sino del propio Gobierno de la Nación", afirmó el ex presidente.

Para Aznar, "la banda terrorista ha tenido suerte", aunque pueda parecer "desalentador" decirlo. "Cada vez que ha sido empujada al borde de su derrota, -precisó- han aparecido para rescatarla de ese destino una legión de oportunistas muy escasos de escrúpulos, siempre pensando que podrían sacar algo que les beneficiaría impidiendo que esa derrota se consumara".

En su discurso tras recibir el premio de la Fundación Miguel Angel Blanco, Aznar fue desgranando las mentiras y ocultaciones que, en su opinión, ha hecho el Gobierno sobre su negociación con ETA, al término de las cuales reivindicó el valor de la verdad.

"El Gobierno y su partido -agregó- vuelven a equivocar sus prioridades. No es el silencio en el que deben refugiarse, sino en la verdad y en la recuperación de una auténtica política antiterrorista que no deje a ETA duda alguna de que el objetivo vuelve a ser su derrota".

Para Aznar "ETA siempre tendrá una posibilidad de sobrevivir si se mantiene la puerta abierta a una negociación que, como hemos visto, significa aceptar que los terroristas se sienten a negociar no el futuro sino la destrucción de nuestro marco constitucional". "Así que hablemos. Hablemos sin miedo" pidió Aznar a los asistentes al acto, a quienes había reconocido, al comienzo de su discurso, que "cuesta alzar la voz para decir que el emperador va desnudo", en el sentido de expresar lo que nadie se atreve a decir.

"Hoy es un día apropiado para que comprendan que no vamos a aceptar lecciones fácilmente, no por arrogancia, sino por experiencia y sacrificio", dijo Aznar al recordar los días en que, diez años atrás, ETA secuestro y asesinó al concejal de Ermua.